Existen muchos tipos de cabello y es muy común que para algunas mujeres resulte difícil saber cómo cuidarlos adecuadamente. Pelos secos, quebradizos u opacos, suelen ser algunos de los problemas con los que se deben lidiar a diario.
Quizás el motivo es que muchas desconocen cuáles son sus tipos de cabello y por eso no les proporcionan los cuidados que realmente necesitan. Y como resultado, obtienen una melena maltratada y con poca vida.
Pero, para que dejes de sufrir por intentar tener el pelo perfecto, a continuación, te mostraremos los tipos de cabello más comunes. Además, de todo lo que debes saber para lucir una hermosa cabellera.
Tipos de cabello más comunes: Características y consejos para cuidarlos
Estos se pueden clasificar dependiendo de la cantidad de sebo del cuero cabelludo, la forma y textura que presenten y si han sido o no expuestos a tratamientos.
Según la producción de grasa:
Es uno de los tipos de cabello más comunes. Por lo general se trata de pelos con exceso de grasa y de apariencia sucia. Esto se debe a una mayor producción de aceite por las glándulas sebáceas. Las causas pueden ser muchas como, por ejemplo (Divins, 2014):
- Uso excesivo de acondicionadores o cremas hidratantes.
- Comprar champú no indicado para el tipo de cabello.
- Peines o cepillos sucios.
- Uso continuo de sombreros.
- Tocar frecuentemente el cabello con las manos sucias.
- Mala técnica de lavado (AEDV, s.f.).
¿Cómo detectarlo? Pues si eres de las que se debe lavar el cabello casi a diario, entonces este es tu tipo de pelo. Ahora bien, ya que sabes a qué grupo perteneces, ¿cuál es el siguiente paso?
Es importante que conozcas algunos datos que debes tener presente para que logres un cabello de comercial de champú, como, por ejemplo:
- Acostumbra a exfoliar tu cuero cabelludo: Este ritual lo puedes realizar por lo menos 1 vez a la semana y consiste en quitar las impurezas del cuero cabelludo con el uso de cepillos exfoliantes especiales. De esta manera evitarás que la suciedad y las células muertas obstruyan los folículos pilosos.
- Usa productos especiales para este tipo de pelo: Esto es básico y esencial pues si eliges el producto indicado, puedes lograr por fin quitar el molesto problema del cabello graso. Para ello, puedes elegir los que contengan ingredientes naturales como, por ejemplo: Menta, hierbabuena o proteína de soja que impiden que el sebo se distribuye por todo el mechón. Además, es importante que el pH sea neutro y que no contenga silicona. Sin embargo, lo aconsejable es que acudas con un especialista quien te podrá orientar según tu condición.
- Precaución con el acondicionador: No es que no lo puedas usar, al contrario, te lo puedes aplicar, pero evita lo más que puedas la raíz. Solo debes colocarlo desde el medio hacia las puntas y listo.
- Cabello seco
Al contrario del anterior, en el cabello seco suele haber poca producción de grasa. Esto debido a:
- Uso excesivo de tintes.
- Aplicar un champú inadecuado.
- Exposición continua a secadores, planchas para cabellos o a los rayos solares.
- Mala alimentación.
¿Cómo evitarlo? Fácil, solo debes procurar no exponer tu cabello a todas esas situaciones que lo mantienen maltratado. Además, puedes utilizar productos , mascarillas o tratamientos que contengan aceites de semilla de sésamo y de girasol o aceite de coco.
Otra opción es el acondicionador ¡este será tu mejor aliado!, puedes optar por uno que tenga efecto reparador de daños. Y si después de esto no observas mejoría, lo mejor es acudir con un dermatólogo para que te oriente (Clínicas Las Condes, s.f.).
- Cabello normal o balanceado
Si el cabello normal o balanceado resulta ser tu tipo de pelo ¡felicidades!, eres realmente afortunada. Tienes la melena soñada que todas quisiéramos tener. Posees el equilibrio perfecto entre la grasa normal y humectación adecuada.
Pero, ¿cómo saber si formas parte de este grupo de mujeres con cabello normal? Aquí la respuesta:
El cabello es suave y sedoso cuando lo tocas y no sufres ni siquiera un instante para poder peinarlo. Tiene un brillo natural y lo mejor, no suele formar friz con la humedad. Parece de cuento de hadas ¡lo sabemos!, pero la buena noticia es que todas lo podemos llegar a tener.
Entonces ¿Qué podemos hacer?
En general se trata de una melena bien cuidada que no se expone a ninguno de los factores mencionados en los otros tipos de cabello. Por lo tanto, debes tener en cuenta lo siguiente:
- Evita lavar el cabello con agua caliente.
- Corta tu pelo regularmente.
- Peina y desenreda tu cabello cuando esté húmedo.
- Evita acostarte con el pelo mojado.
Si sigues estos consejos, notarás que en poco tiempo lograrás una cabellera hermosa.
Tipo se cabello según su forma
Al contrario de lo que muchos piensan, este tipo de cabello resulta todo un dolor de cabeza. A pesar de que tener una melena rizada es el anhelo de muchas, mantenerlo bien cuidado puede resultar todo un desafío.
El asunto es que esta clase de cabello tiende a deshidratarse muy rápido. Y es muy común observar cómo se ven maltratados sobre todo en el área de las puntas. Esto porque la grasa natural del cuero cabelludo queda acumulada en la raíz y en la parte media del pelo.
Lo que dificulta el descenso del cebo hacia las puntas por las curvas naturales que poseen estos tipos de cabello. Sin embargo, para lucir una hermosa melena rizada, puedes seguir los siguientes consejos:
- Lava tu cabello con un champú especial para estos tipos de cabello.
- Desenreda con tus dedos mientras aún estés en la ducha.
- Usa acondicionador desde la parte media hacia las puntas.
- Seca preferiblemente con una toalla de algodón.
- Cabello ondulado
A pesar de que es muy parecido al anterior, el cabello ondulado se diferencia en que en estos tipos de cabello se ven menos pronunciados. Y el rizo suele aparecer desde el medio hacia las puntas.
Ahora bien, el problema está en que el cabello ondulado se enreda fácilmente pero mucho menos que los pelos rizados. Para poder mantenerlos bien cuidados, solo deberás seguir las recomendaciones anteriores.
El cabello lacio es una de las melenas que ocasiona pocos dolores de cabeza pues resultan más sencillas de mantener. Sin embargo, uno de los principales problemas con los que suelen lidiar estos tipos de cabello es el friz.
Solo basta con que, lo mantengas bien humectado, uses un champú sin sal ni parabenos. Intentes evitar productos que contengan alcohol, lo peines con regularidad y evites exponerlo a agentes dañinos como los tintes o el sol.
Según los tratamientos
- Cabellos teñidos
No podíamos dejar de mencionar estos tipos de cabello, pues son uno de los más comunes que existen hoy en día. A pesar de que tienden a maltratarse mucho más que los cabellos naturales, no podemos negar que los tintes hacen que las melenas luzcan muy atractivas.
Pero, para evitar lucir una cabellera maltratada, es importante que tomes en cuenta lo siguiente:
- Usa un champú humectante y que además tenga efecto protector de color, con extractos orgánicos a base de caléndula, de aloe vera, girasol y vitamina E ideal para conservar la intensidad del color.
- Aplica mascarillas que humecten tu cabello al menos 1 vez a la semana.
- Protégelo de los rayos solares con productos que contengan protección UV (Peraza, 2019).
Hablemos de texturas ¿Cómo identificar qué tipo de textura tiene tu cabello?
Los variados tipos de cabello pueden tener distintos tipos de texturas y es importante que puedas identificar la tuya para que lo logres cuidar adecuadamente. Aquí te mostraremos unos sencillos trucos que te ayudarán a reconocer mejor la textura de tu pelo.
Cabello grueso o fino
Son muy fáciles de reconocer. En los tipos de cabello finos, al pasar los dedos entre el cabello, no se logra sentir las hebras de tu pelo. Por otro lado, en el cabello grueso, al realizar este paso puedes sentir algo semejante a si tuvieras un hilo.
¿Como cuidarlo?
- Finos: Uso de champú seco sin silicona, aceite de aguacate y vitamina E
- Grueso: Productos con proteína de queratina
Escaso o abundante
En los escasos es fácil apreciar el cuero cabelludo entre los mechones de tu pelo. Por el contrario, en los cabellos abundantes es difícil poder observarlo.
Para cuidarlo puedes usar:
- Escaso: Aceite de ricino y romero para estimular el crecimiento del cabello.
- Abundante: Usa champú de proteína de queratina.
Baja o alta elasticidad
Un pelo saludable es aquel que sea lo suficientemente elástico como para estirarlo y que se logre expandir fácilmente. El primero es un cabello que se rompe con facilidad ya sea al peinarlo o estirarlo. Por otra parte, el de alta elasticidad suele ser difícil de romper. (Sakure, 2017)
Algunos ingredientes que debes tomar en cuenta para cuidar tu cabello son:
- Baja elasticidad: usar champú y acondicionadores que contengan proteínas.
- Alta elasticidad: Productos a base de Karité y glicerina.
Baja o alta porosidad
Al hablar de porosidad nos referimos a cómo el cabello absorbe los químicos, los productos y la humedad. Los de baja porosidad los puedes reconocer al observar cómo las hebras de tu pelo se quedan flotando en la superficie del agua.
La importancia de conocer el tipo de porosidad de tu cabellera radica a la hora de aplicar algún producto. Pues dependiendo de qué tan poroso sea, podrá absorber de mejor manera.
Por ejemplo: los de baja porosidad no absorben bien los productos, ya que tienden a secarse despacio y por ende suelen acumularse. Por otro lado, en los de alta porosidad es necesario utilizar mucho más del producto que se esté aplicado pues lo absorbe rápidamente.
Para cuidar bien de tu cabello puedes usar:
- Baja porosidad: Miel, aceite de uva, extractos de aloe vera y productos a base acuosa.
- Alta porosidad: Productos con aceite de argán, ácidos grasos, aminoácidos y proteínas.
En resumen, reconocer los tipos de cabello te permitirá identificar mucho más fácil a qué grupo pertenece el tuyo. Y como resultado, podrás cuidar adecuadamente de él y así lograrás tener una hermosa e impactante melena. Si quieres leer más sobre tratamientos naturales para cuidar tu cabello haz click aquí!